Con Magda Blanch conversamos sobre lo que realmente marca la entrada a la maternidad y la paternidad: el deseo de serlo. Ser madre o padre es una experiencia única, distinta para cada hijo o hija, que despierta emociones, proyecciones y también renuncias.
Los primeros años de vida no siempre son idílicos: requieren de una disposición interna de los padres para sostener tanto lo bello como lo difícil.
En psicoanálisis, más que de roles, hablamos de funciones materna y paterna, que no dependen del sexo biológico: un padre puede ejercer una función materna y una madre una función paterna.
Crecer, para los hijos y también para los padres, implica siempre una transformación: cada paso adelante lleva consigo una renuncia y un duelo.
